Espero que hayais tenido un buen verano. Aquí ha sido extraordinario y seguimos con tiempo de sur, delicioso.
Pues como algunos saben, tenía yo en mente irme en Septiembre a Tierra Santa con mi madre, pero cambiamos de planes.
Ella tenía muchas ganas de ir al Balneario de Arnedillo ( ya había ido al de Jaraba, entre otros ), pero de éste tenía una anécdota curiosa: su abuela, que llegó al balneario prácticamente impedida, salió de allí por su propio pie y nunca más se enfermó hasta su muerte.
La verdad es que antiguamente los balnearios eran un poco cosa de gente mayor y achacosa, aunque los había como el famoso Baden-Baden que hacían las veces de lugar de cotilleo de altos vuelos de la época...
Pues entré en internet, eché un vistazo al lugar, llamé por teléfono y contraté una semana para ambas, con tratamiento antireumático completo. Me dejó de piedra el precio...pero pagaba mami y estaba empeñada en ir.
Nos compramos un gorro de piscina de cadena 100, hicimos las maletas y nos dejamos conducir allí por mi marido .
Desde aquí ( Santander ), son unas dos horitas largas y eso que hay autopista ( pagar toca! y me pareció caro ) pues si vas por la nacional puedes no llegar tan a gustito...
Antes de instalarnos y como teníamos marcada la entrada a las 2 pm, nos sentamos a comer en la entrada del pueblo, en un restaurante muy gracioso llamado La Petra, que tiene la terraza-comedor en la curva de la carretera y la cocina al otro lado de la carretera, por lo que los camareros las pasan canutas con sus bandejas y platos cruza que cruza...La carta muy típica de esa zona con abundancia de menestras naturales, etc. El tiempo estaba estupendo, así que comimos con calma, todo lleno y muy animado.
Llegamos al SPA y, aunque era domingo, la recepción estaba llena por lo que la atención fue un tanto lenta. Tampoco es que el personal fuera demasiado simpático...
Mientras nos inscribíamos todo era bullicio de personas en albornoz y zapatillas blancas, de acá para allá. Mucha pareja joven, mucho matrimonio con niños y claro, gente de mediana edad y mayor también...
El hall de entrada tiene una cúpula preciosa sobre un círculo de cristal en cuyo fondo bulle el agua termal que suelta un vaho con cierto olorcillo nada desagradable. Es una decoración agradable, hay sillas, sillones, mesas y cuadros.
En dicho vestíbulo están unos cuadros bastante deteriorados de los fundadores, a saber:
Don Florencio Martínez de Pinillos y Ripa, que adquirió el lugar al pueblo de Arnedillo en 1847 ( fecha desde la que está funcionando siempre en manos de esta familia, aunque ahora en las zapatillas y albornoz que te dan figura el nombre Termaeuropa, que debe ser una especie de sociedad en la que participan, supongo ) . En 1997 celebraon el 150 aniversario del balneario en manos de la familia Martínez Pinillos.
Otro cuadro justo al lado representa a doña Josefina Garate y Joaristi y un poco más allá otro de su hijo Felipe Martínez de Pinillos y Garate, un bello caballero de época, en mi opinión.
Las habitaciones de la parte antigua no son nada especial pero se está muy bien. En la parte moderna ( la central ) están mucho más modernas y lujosas.
Hay suficientes salones y salitas más recogidas, una biblioteca con la única zona de fumadores y un salón habilitado con Home cinema donde todas las noches nos ponían una película ( un tanto viejas pero que se dejaban ver...)
Hay dos ascensores y bajan ambos hasta la piscina cerrada con duchas, baños, cambiadores, donde están los chorros, cascadas y el agua calentita, deliciosa. Son termales, claro !
Una cosa que se nota casi de inmediato es la suavidad que va adquiriendo la pìel. Todavía me dura...
Puedes andar todo el día en bañador y albornoz por el interior, salvo para desayunos, comidas y cenas.
Hay un restaurante y un buffet. Al final el menú es el mismo y es más cómodo y divertido el buffet. Estaba todo lleno y son 400 habitaciones...Habrá quien diga que la comida no es nada del otro mundo pero a mí con tal que me lo den hecho, todo me va. Hay también aparcamiento para los clientes y visitantes.
Hay una capilla dedicada a San Zoilo, santo de Córdoba, del s. IV, mandado matar por Diocleciano ( ¡quien sino ! ) y que está enterrado en Carrión de los Condes ( Palencia ) cuya fiesta se celebra en el balneario el 27 de Junio. Al pobre Zoilo el malvado Diocle le mandó arrancar los riñones y la cabeza y ordenó que lo tiraran todo a un pozo. Más tarde los cordobeses se empezaron a bañar en dicho pozo y dijeron que se curaban de sus dolencias...
El cura decía misa diaria a las 6 pm y luego a las 8 pm en la iglesia de Arnedillo, dedicada a San Servando y San Germán, una iglesia preciosa que merece la pena visitar. Está la iglesia situada en un lugar muy bonito junto a la plaza mayor y una hospedería llamada Las Pedrolas que tiene el distintivo de Rusticae, marca de calidad reconocida.
Y es que para hacerse tratamientos en el balneario no es necesario hospedarse en el SPA aunque sea más cómodo. Hay muchos hotelitos y pensiones...
Hay también en Arnedillo mucho para pasear. Todos los días ponen en el hall del SPA las excursiones con guía, la dificultad y los horarios. Nosotras, como teníamos contratados tantos tratamientos nunca pudimos ir con los grupos, pero en los tiempos muertos íbamos solas.
Las tratamientos contratados era: barros diarios, ducha circular, masaje descontracturante , hidromasaje y que sé yo qué mas...
Es importante saber que cuando llegas, aunque sea domingo, lo primero que hay que hacer es la visita médica. El doctor o doctora de turno charla contigo y te deja o no hacer los tratamientos contratados. Nos tomaron la tensión, preguntaron medicvamentos que tomábamos, etc y nos dejaron hacer todo, menos mal !
Básicamente lo más importante son los barros. Esto se hace casi como hace 150 años. De hecho hay muchas fotos en el comedor, antiguas, donde se ven los " resudados ", que parecen momias y me daban mucha risa. Pues consiste la cosa en bajar al lugar ( hay ascensores también ) con tu albornoz y bañador o desnudo, da igual. Presentas el papel donde está todo consignado por ordenador y te dan un taparrabos muy cuco azul marino con cinta blanca que apenas te tapa el pubis y por detrás tanga total. Te tumbas en la camilla recubierta de un plástico blanco grueso y llega la chica con las perolas de barro ardiendo. Te incorporas y te pega una brazada de barro humeante en la cintura. Te acuestas y te pone lo mismo en hombros, caderas, manos, pies. Te cubre con el plástico sobrante del cuello a los pies y añade una manta preparada al efecto. Ya estás momificado !!!!!!! Unos sudan , otros no. Yo echaba agua por cada poro...Hay una musiquilla ambiental y estás así unos 20 minutos. Me daba algo de claustrofobia el primer día pero después estaba deseando los barros...Vuelve la chica con una sábana blanca, te limpia un poco el sudor de la cara y esperas. Al final te destapan, retiran a brazadas los barros y pasas a la ducha caliente para quedar limpia y relajada.
Conviene irse a la habitación y reposar los barros, dicen que es lo mejor.
La ducha circular es deliciosa, un montón de chorros como agujas pero que no duelen, casi hacen cosquillas y te dan por todas partes. Una pena cuando se acaban..
El masaje, gozo y tormento. Descontracturar duele, vaya si duele !!!! Pero la recompensa es inmensa. Juan, mi quiromasajista me dejó como nueva y adiós cargazón de escribir, cargar pesos y demás cosas que nos van armando nódulos dolorosos en el maltrecho cuerpo... Olía a aloe vera y cardamomo en la sala de masajes individual y la charla con el chico era también relajante.
Las piscinas externas son dos, una con olas y otra normal. Ambas preciosas y muy animadas. Calentitas. El paisaje te hace soñar...
Y el spa de abajo es una gozada que hay que disfrutar a diario, incluso varias veces al día siempre que procures no estar más de 20 minutos de cada vez ( puede bajar la tensión ).
Hacen también tratamientos faciales, depilación láser, inhalaciones, enfin, de todo.
Hay otro hotel muy cerca que pertenece al balneario y es más económico. Te llevan y traen en camionetas a pesar de estar a pasos del SPA.
El río que pasa por Arnedillo se llama Cidacos y seguro que más de una vez habéis visto esta marca en latas de pimientos o espárragos. El pueblo es muy bonito, lleno de callejuelas empinadas y huertas llanas. Hay bodegas excelentes ( particulares ) y el balneario invita a la suya que está cerca del restaurante La Petra antes citado, al principio del pueblo. Te dan vinillo, aceitunas, chorizo, y allí charlas con otros huéspedes del SPA. Divertido, anti stress...
Hay caminos preciosos para pasear. Al lado del balneario están las " pozas ", aguas iguales a las del balneario pero gratis, en la orilla del río. Siempre hay gente, incluso desnuda. Generalmente mucha gente del pueblo va a diario y creo firmemente que tienen una suerte increíble los vecinos de este lugar !
Como rutas que hicimos, unas veces entre pinares y otras entre olivos, la del Sagrado Corazón, la del cementerio y ermitas, la ruta verde ( peatones, bicis, patinetes..) que puedes hacer hasta Calahorra ( 17 kms ), y una infinidad de paseos comodísimos y bellos.
Bonito también el Mirador del Buitre, didáctico, etc...
Ya si te gusta y te pones, ir a Enciso a ver las huellas de dinosaurios ( hay otros muchos lugares en las cercanías con huellas de esos bichos ).
Y si te va, a 70 kms una visita a Soria...
La verdad es que hay un ambiente de calma y paz, la gente disfruta de la lectura, paseos, cartas, descanso.
Hoy Arnedillo es uno de los balnearios mejores de Europa y de España y es muy recomendable.
Como colofón puedo decir y digo que arrastaba una lumbalgia, ciática o similar desde noviembre del año pasado que no me había tratado con nada. Al regresar a casa ya no tenía molestias y espero que dure...
Y bien, creo que me he pasado y eso que no he contado ni la mitad de lo que vi y experimente.
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